¿Padece de dolor crónico en el pulgar? ¿Ya no puede destapar un bote? ¿Se le está debilitando la la fuerza de agarre? Quizás estos síntomas se relacionan con rizartrosis... Esté atento a los signos característicos de la rizartrosis del pulgar para que puedas luchar en cuanto sientas los primeros síntomas.
Síntoma principal de la rizartrosis: el dolor de pulgar
La primera y más importante señal de alarma es el dolor. Es discontinua y se relaciona sobre todo con los movimientos específicos del pulgar, tales como al agarrar un objeto. Se trata de un dolor mecánico de carga, o de dolor de esfuerzo que se alivia al reposar. Las acciones que exigen una gran precisión tales como introducir una llave en una cerradura o tener un lápiz también pueden volverse dolorosas. Además, en caso de rizartrosis, los movimientos de rotación (circunducción) pueden doler. Los gestos de oposición con los otros dedos, especialmente con el índice, también son dolorosos. A veces se puede hacer sentir de manera viva y brusca y también lancinante(1). ¡Cuidado! No obstante, todos los dolores de pulgar no son rizartrosis. Este síntoma puede revelar otras patologías, especialmente una tendinitis. Por eso, consultar un especialista queda imprescindible para que el diagnóstico se establezca de manera objetiva.
Ciertas personas afectadas por rizartrosis también muestran una dificultad y una pérdida de fuerza de la pinza de agarre, que puede ser invalidante, incluso incapacitante.
La deformación: síntoma del empeoramiento de la artrosis del pulgar
La evolución de la rizartrosis suele ser muy lenta. Generalmente, se escalona en unos diez años. El paciente pasará de un estado de doloroso a una deformación progresiva del pulgar, con forma de "Z". El estado funcional de la primera columna del pulgar se deteriora poco a poco, lo que permite que la deformación se instale duraderamente(1).
Esta deformación antiestética, que empieza por estar imperceptible, también es especialmente incapacitante a diario. El uso de la pinza (pulgar-índice) se vuelve difícil y la articulación pierde flexibilidad. Así pues, la rigidez de la base del pulgar limita los movimientos.
Soluciones para combatir los síntomas de la artrosis del pulgar
Para evitar esta desviación que suele necesitar una intervención quirúrgica, varias soluciones existen, de las más suaves a las más drásticas. Ciertas opciones medicamentosas aliviarán el dolor mientras que la cirugía corregirá la deformación...
EPITACT® eligió privilegiar la prevención para que se limite o ralentice el avance de la patología. Para eso, dos ortesis se han diseñado para que mejoren su comodidad a diario. La ortesis flexible de día rizartrosis* cuyo objetivo es limitar los micromovimientos e incitarle a corregir de manera intuitiva los movimientos que dañan más a la articulación.
La ortesis rígida de noche para rizartrosis* le pone la muñeca en reposo para que alivie el dolor y ralentice el deterioro del cartílago.
*Estas soluciones son productos sanitarios de clase I, que llevan el marcado CE en conformidad con esta normativa. Lea atentamente el manual de instrucciones antes de usar. Fabricante: Millet Innovation. 06/2020
Para ir más allá de este enfoque global y simplificado, aquí están fuentes adicionales:
(1)Delcambre B, Bera-Louville A, Guyot-Drouot MH. Osteoarthritis of the fingers and trapeziometacarpal joints. Joint Bone Spine 2001;68:339–47.
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